Las fuentes de alimentación de laboratorio son dispositivos esenciales para la investigación y desarrollo en electrónica. Estas unidades proporcionan tensiones controladas y corrientes estables para alimentar circuitos y componentes durante pruebas y experimentos. Diseñadas con precisión, permiten ajustar voltajes y corrientes según las necesidades específicas del proyecto. Las fuentes de alimentación de laboratorio suelen ofrecer modos de operación variable, como constante voltaje o constante corriente, lo que las hace versátiles para una amplia gama de aplicaciones. Además, suelen incluir protecciones integradas contra cortocircuitos y sobrecargas para salvaguardar los componentes bajo prueba. Estos equipos son fundamentales en entornos educativos e industriales, brindando a los profesionales y estudiantes un control preciso sobre las condiciones de alimentación para lograr resultados experimentales fiables y seguros.